Pregunta:
Yo tengo una pregunta: Hace mucho tiempo q yo no sé que es felicidad, no me rio y siento que tengo a alguien en mi mente. ¿Qué tengo que hacer?
El apóstol Pablo se sintió igual cuando no conocía a Jesucristo personalmente y aún no había entrado en un nuevo pacto con Él. Aquí están las palabras de Pablo escritas en la Epístola de Romanos.
Yo sé que en mí, es decir, en mi naturaleza pecaminosa, nada bueno habita. Aunque deseo hacer lo bueno, no soy capaz de hacerlo. De hecho, no hago el bien que quiero, sino el mal que no quiero. Y si hago lo que no quiero, ya no soy yo quien lo hace sino el pecado que habita en mí.
Así que descubro esta ley: que cuando quiero hacer el bien, me acompaña el mal. Porque en lo íntimo de mi ser me deleito en la ley de Dios; pero me doy cuenta de que en los miembros de mi cuerpo hay otra ley, que es la ley del pecado. Esta ley lucha contra la ley de mi mente, y me tiene cautivo. ¡Soy un pobre miserable! ¿Quién me librará de este cuerpo mortal? (Romanos 7 :18,24)(NVI)
En el próximo versículo el apóstol dice:
¡Gracias a Dios por medio de Jesucristo nuestro Señor! En conclusión, con la mente yo mismo me someto a la ley de Dios, pero mi naturaleza pecaminosa está sujeta a la ley del pecado. (Romanos 7:25) (NVI)
Y para entender bien que solo en Jesucristo el tiene liberación de un estado opresivo del pecado donde el fue, vamos a leer que el apóstol Pablo dice en los próximos versículos:
Por lo tanto, ya no hay ninguna condenación para los que están unidos a Cristo Jesús ,pues por medio de él la ley del Espíritu de vida me ha liberado de la ley del pecado y de la muerte.( Romanos 8:1,2) (NVI)
La segunda persona que tú dices tener en tu mente es la ley del pecado que está en tus miembros. Tendrás salvación solo cuando aceptes a Dios en tu corazón, y entres en el nuevo pacto con el Señor Jesucristo. Dios te ayudará para hacer este paso tan importante en el que encontrarás la felicidad verdadera. EL señor Jesús dijo a sus discípulos:
Les he dicho esto para que tengan mi alegría y así su alegría sea complete.(Juan 15:11) (NVI)
Esta alegría y la paz lleno los corazones de los santos todo el tiempo y esto también va llenar en tu vida si tu elegís ser el discípulo verdadero de Jesucristo
Así Dios te ayuda.
Traducido por Tatiana Cioconari.